Horribilis dia

Hoy me encuentro mal, sí, muy mal.

Apenas puedo estar delante del ordenador o haciendo cualquier otra cosa, así que intentaré ser breve.

Encontrarse mal y no poder hacer nada es un asco, ya que te obliga a estar encamada (si no tienes nada importante que hacer y eres una vaga de la vida, como es mi caso) y cuando estoy así, paradójicamente, es cuando más ganas tengo que hacer cosas. Una putada, vaya. Y cuando una está encamada no para de darle vueltas a la cabeza, con sus catastróficas consecuencias; me vienen pensamientos que hacen estragos en mi ánimo. Es como una matanza, un holocausto del escaso optimismo y felicidad que se tiene en uno de estos días.

Pero, ¿qué te pasa, mi pobre desgraciada?

Ah, pues tengo mareos. Y ganas de vomitar, de aquellas que te dan falsas alarmas para que vayas al lavabo pero que al final no te sale ni una triste y solitaria arcada. Bueno, si lo pienso friamente... Casi que es mejor así.

En fin, creo que ya está todo dicho. Que tengan muy buenas tardes.